Bartleby y compañía
Enrique Vila-Matas
Ensayo
Anagráma, Barcelona, 2002. 218 págs.
Enrique Vila-Matas
Ensayo
Anagráma, Barcelona, 2002. 218 págs.
Un libro sin texto. Una colección de notas al pie que se entretejen formando un híbrido de novela y ensayo, o más bien, un caprichoso recorrido por la literatura del No, la de escritores que nunca lo fueron o dejaron de serlo, como Rulfo y Rimbaud, que desaparecieron silenciosamente del mundo de las letras.
El narrador, un hombre un tanto jorobado y otro tanto acomplejado, que escribió en su juventud una mediocre novelita y tras esta renunció al arte de tinta y papel, decide volver a la tarea con el sólo afán de llevar al lector de su mano para mostrarle la intrincada red literaria de bartlebys, esos seres que renuncian a todo y encuentran en su grito silencioso una fuerza mayor a la escritura.
Su nombre y su negación les viene de aquel pálido oficinista creado por Herman Melville, que poco a poco renuncia a su vida y lo que le rodea, y que termina por responder a cualquier petición con un contundente «Preferiría no hacerlo».
Este relato, llevará al curioso lector a un inagotable mar de lecturas, de un libro a otro, de un escritor a otro… tratando de desentrañar el misterioso silencio de los bartlebys, se contagiará inevitablemente de la fascinación provocadora de la literatura.
Mariana M. Salgado
El narrador, un hombre un tanto jorobado y otro tanto acomplejado, que escribió en su juventud una mediocre novelita y tras esta renunció al arte de tinta y papel, decide volver a la tarea con el sólo afán de llevar al lector de su mano para mostrarle la intrincada red literaria de bartlebys, esos seres que renuncian a todo y encuentran en su grito silencioso una fuerza mayor a la escritura.
Su nombre y su negación les viene de aquel pálido oficinista creado por Herman Melville, que poco a poco renuncia a su vida y lo que le rodea, y que termina por responder a cualquier petición con un contundente «Preferiría no hacerlo».
Este relato, llevará al curioso lector a un inagotable mar de lecturas, de un libro a otro, de un escritor a otro… tratando de desentrañar el misterioso silencio de los bartlebys, se contagiará inevitablemente de la fascinación provocadora de la literatura.
Mariana M. Salgado
