Sonata a Kreutzer
Lev Tolstói
Novela
Acantilado, Barcelona, 2003. 162 págs.
Lev Tolstói
Novela
Acantilado, Barcelona, 2003. 162 págs.
Tolstoi, exponente ruso del realismo y autor de clásicos universales como Ana Karenina y Guerra y Paz, demuestra que su ingenio creador no sólo es para novelas extensas, sino que también es un artista en el relato breve.
Sonata a Kreutzer se desarrolla con una naturalidad especial y conduce al lector al aparente eje principal para revelar, al final, la verdadera intención de Tolstoi: criticar la doble moral de la burguesía de la época.
El libro narra la tragedia de Pózdnyshev, un desafortunado hombre que cuenta cómo su matrimonio decae, haciéndolo reflexionar acerca de los valores predominantes en una sociedad en la que, supuestamente, la rectitud es piedra angular.
Al conocer los juicios que Tolstoi emite sobre el matrimonio, el libro permite apreciar que caviló mucho sobre su naturaleza: su evolución frente a la rutina, la cercanía o el distanciamiento de los que pueden ser víctimas. Resulta obvio para el lector que tales elucubraciones son fruto de su experiencia personal.
También sorprende que las relaciones humanas, así como algunos sectores de la sociedad, a pesar de haber transcurrido años, siglos incluso, sigan sin aspirar a la perfección, que, finalmente, es la forma como podemos acercárnosle.
Pamela H. Noreña
Sonata a Kreutzer se desarrolla con una naturalidad especial y conduce al lector al aparente eje principal para revelar, al final, la verdadera intención de Tolstoi: criticar la doble moral de la burguesía de la época.
El libro narra la tragedia de Pózdnyshev, un desafortunado hombre que cuenta cómo su matrimonio decae, haciéndolo reflexionar acerca de los valores predominantes en una sociedad en la que, supuestamente, la rectitud es piedra angular.
Al conocer los juicios que Tolstoi emite sobre el matrimonio, el libro permite apreciar que caviló mucho sobre su naturaleza: su evolución frente a la rutina, la cercanía o el distanciamiento de los que pueden ser víctimas. Resulta obvio para el lector que tales elucubraciones son fruto de su experiencia personal.
También sorprende que las relaciones humanas, así como algunos sectores de la sociedad, a pesar de haber transcurrido años, siglos incluso, sigan sin aspirar a la perfección, que, finalmente, es la forma como podemos acercárnosle.
Pamela H. Noreña