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Todos somos sociales, ¿cuál es nuestra red?

¿Qué sucede cuando llegamos a una reunión donde hemos sido invitados por un amigo nuevo? Primero intentamos rechazar la invitación, disfrutamos más la soledad de nuestro cuarto y la computadora e internet donde podemos vivir otras vidas, donde podemos liberarnos en la catarsis esclavizándonos. Pero nuestro amigo insiste y finalmente aceptamos.
Cuando llegamos todos nos saludan amablemente, anteponiendo su nombre y actividad. Nuestro cerebro almacena esta información en nuestra memoria RAM (Random Access Memory o lo que es lo mismo: memoria que se olvida rápido) que con celeridad identifica con quiénes podemos entablar una conversación, los escogemos y ya está, comenzamos a hablar obteniendo todos los datos de nuestro disco duro (cerebro).
De pronto, la conversación toca un tema de interés para muchos –digamos la próxima incursión del iPhone a México– y nuestra buena retórica hace que otros se unan a la plática y proporcionen toda la información que han obtenido de diversas fuentes.
En su último libro, Gardner llama a esta capacidad del ser humano mente sintética. Al terminar la reunión hemos conocido nuevos amigos y obtenido más información que quizá cambie nuestra opinión respecto a un producto, servicio o hecho.
Analicemos cuidadosamente la situación. Esta riqueza espiritual es consecuencia de la naturaleza social del hombre y depende siempre del temperamento de cada persona, de cuán amigable se torne; más aún, de qué tan grande sea el número de círculos sociales que frecuente. Pero aún el más sociable de los amigos enfrenta varios problemas.
El primero es el tiempo, esa mágica dimensión del universo que nos limita a una existencia, unos años, unos meses, unos días, unas horas, unos segundos que dificultan encontrarnos con la persona que nos interesa intercambiar información a determinada hora. Otro obstáculo es la distancia que debemos recorrer sobre todo en nuestra caótica ciudad de México que en el año 2000 tenía 680 autos por kilómetro cuadrado y al 2006 ha aumentado a 884; o más lejos, interactuar con personas de otras latitudes, afrontar económicamente viajes, congresos o llamadas que, por lo caro, no pueden ser muy frecuentes.
La situación planteada atiende solamente al ámbito de reunión, pero la palabra social tiene connotaciones más profundas de colaboración por un fin común.

INTERNET, ¿ANARQUÍA O COLABORACIÓN?

Muchos nos preguntamos qué es internet, ¿una gran biblioteca? ¿La más potente fotocopiadora? ¿La anarquía? Debemos concluir que es el medio más grande de comunicación.
Nació totalmente abierto a la generación de contenidos, pero ha sido atacado por gobiernos –al filtrarlo en más de 40 países–, y corporaciones –que limitan su código para favorecer el software patentado– atentando contra la natural generación de software libre que pueden generar millones de programadores dispuestos a colaborar gratuitamente. En internet todos podemos ser editores, ya no nos conformamos con ser receptores, hoy podemos comunicar nuestras ideas o hacer nuestras propias redes sociales. Ante el egoísmo suicida del hombre, que señala Octavio Paz en Tiempo nublado, internet ha surgido como una esperanza primero de anarquía por naturaleza, pero también por un espíritu que genera contenidos, programas y relaciones sociales colaborativas y complementarias.

WIKINOMÍA O TODOS EN COLABORACIÓN

Internet facilita compartir recursos, colaborar en proyectos para generar redes de conocimiento al servicio del mundo, no del escaso porcentaje de la población que mueve 80% de la economía mundial. Recuerdo una sesión con el profesor Lawrence Lessig que nos demostraba cómo en una sociedad de mercado toda regulación y arquitectura económica se encamina a favorecer a las corporaciones dejando a un lado a los innovadores cuya segunda firma (la primera era para acordar los varios miles de dólares mensuales de su nómina) dentro de la empresa era renunciar a todos los derechos de propiedad industrial sobre sus inventos a favor de la empresa.
Desde un punto de vista, las patentes se tornan inhibidores del progreso que puede generar cualquier otro inventor en un espíritu de exclusiva colaboración. No desconozco que también protegen la inversión ?siempre limitada a los recursos que destinen las empresas y al personal que puedan contratar? para la investigación y desarrollo de nuevos productos. Ahí comienza el gran movimiento de Creative Commons que explota esa gama de grises entre el blanco que sería todo aquello del dominio público y la propiedad industrial absoluta, el negro. Sin embargo, el mercado parte de una premisa hobbesiana del hombre egoísta, premisa que nuestra generación ha probado falsa o por lo menos relativa.
Así lo ha demostrado Jimmy Wales con Wikipedia, el proyecto colaborativo universal más ambicioso de la historia de la humanidad cuya meta es abrir a todo ser humano en cualquier rincón del planeta la suma de todo el conocimiento de la humanidad. ¿Ambicioso? ¿Posible? Por lo menos plausible. Hoy se avoca a desarrollar wikibooks, wikimedia y el propio término wiki se ha acuñado en la sociedad como colaboración sin obstáculo.
Incluso hoy se habla de Wikinomía donde todos participamos en la producción, distribución y consumo de bienes o servicios a través de la tecnología; de la mercadotecnia orientada al cliente, incluso del marketing de los sentidos resultado de la retroalimentación del cliente a los productos.
La tecnología nos permite evaluar un servicio de manera asincrónica y, por ende, mejorarlo. Esto no significa que antes no hubiera colaboración, pero se daba en el feudo, la familia, entre amigos, o dentro de la empresa; hoy, a través de internet, podemos ser todos editores y ser leídos, escuchados o incluso vistos en todo el mundo con la velocidad de la web.
Esta facilidad para intervenir en la creación, mejora e innovación ha promovido un progreso más rápido y las iniciativas de la información libre, sin fronteras. Es ya muy conocido el proyecto OCW (opencourseware) del MIT para hacer llegar el contenido de sus clases a todo el mundo de manera gratuita. Esta iniciativa ha movido a más de 100 universidades del mundo a crear el Consorcio OCW que genera un millón de visitas al año. El propio innovador Steve Jobs creador de iTunes ha alojado iTunesU que almacena material de 28 universidades

MASHUP: HERRAMIENTA PARA COPIAR Y MEJORAR

Mashup es una aplicación web abierta a la aportación, mejora e innovación de cualquier colega o persona en el mundo. Su filosofía es copiar y mejorar para crear un sitio web nuevo. El mejor ejemplo es Google Earth (http://earth.google.com) y Google Maps (http://maps.google.com;Yahoo! recién ha lanzado su concepto Yahoo! Pipes que invita a mejorar aplicaciones a la web a través de esta herramienta mashup.

FOTOGRAFÍAS, VIDEOS, TV Y SITIOS

Internet nació para compartir información en diversos lugares del mundo, en sus orígenes pensar en compartir fotografías y, más aun, videos era impensable por las limitaciones tecnológicas donde navegaba la red. Hoy, el ancho de banda hace mucho más fácil compartir fotografías de una resolución adecuada como Photobucket (http://www.photobucket.com/) o Flickr (www.flickr.com;hay buscadores de imágenes como Google images (http://images.google.com) o Ditto (www.ditto.com;incluso hay organizadores de fotografías gratuitos como Picasa (http://picasa.google.com/). Los videos ya también son una realidad como en Youtube (www.youtube.com) o Blinkx (http://www.blinkx.com/).
Existe una preocupación real de las corporaciones televisivas porque sus contenidos están en la red antes que en sus propios canales y ya se puede hablar de televisión a la carta como Microsoft (www.microsoft.tv), Joost (www.joost.com) y Babelgum (www.babelgum.com). Lo que deja en entredicho el sustento de esas empresas: la publicidad. La mercadotecnia en la red ya es un hecho (http://adwords.google.com/).
Antes había que publicar en un journal, revista o libro para compartir la investigación personal. Hoy se hace de manera inmediata, con los riesgos que incluye. Uno de los frutos de nuestra investigación en la web es compartir los sitios que nos ha tomado horas encontrar para que nuestra red de amigos los disfrute e invite a otros a compartirlos, clasificados por palabras clave como en Listible (http://www.listible.com/), Simpy (http://www.simpy.com/) o del.icio.us (http://del.icio.us/) que almacena, comparte y descubre nuevos sitios a quien lo desee.

REDES SOCIALES DE COMUNICACIÓN

La web ha marcado una nueva forma de interactuar entre los amigos y no amigos, una manera dinámica, creativa, asincrónica, atractiva donde el reto es atraer y pertenecer. El primer gran sitio es MySpace que se adjudica el sexto lugar mundial de visitas diarias y que consiste en tres grandes apartados «About me», «Who I?d like to meet» e «Interests». Otra red social de amigos es Facebook (www.facebook.com) donde se pueden compartir fotos, videos, notas, grupos, eventos, trivias, causas… En México hi5 (www.hi5.com) es más popular, quizá por haber llegado antes.
La mayor ventaja de internet es la gratuidad del instrumento (no me refiero a la conexión) y la facilidad para comunicarnos con cualquier persona conectada en cualquier rincón del planeta. Las tecnologías han avanzado: al principio el correo electrónico, luego el chat, y finalmente el pensar en voz alta con herramientas como Twitter (www.twitter.com) un micro publicador (140 caracteres máximo por mensaje) que nos permite decir a nuestros amigos qué estamos haciendo. Estos mensajes se pueden limitar a nuestra red de amigos o abrir. Pownce es otro sitio que también envía micromensajes, y a la vez permite compartir archivos, eventos y enlaces.
El más innovador es el que nos permite hablar gratuitamente por teléfono (mejor dicho por diadema) a cualquier parte del mundo sin más requisito que a quien llamamos cuente con el mismo programa. También ofrece la opción de llamada a cualquier teléfono fijo o celular con cuotas extremadamente bajas.
También Google ha presentado su Google Apps (https://www.google.com/a/) que permite compartir calendario, archivos de texto, hojas de cálculo con una suite de oficina totalmente en línea y sin necesidad de software patentado. ¿El fin de Microsoft Office? Quizá. Por eso Microsoft se empeña en sobrevivir a través de su estrategia Windows Live (http://get.live.com/). Pero padece la desconfianza de la Generación Y que contrapone el software libre al patentado.
¿Y EL FUTURO? La guerra por la innovación en el instrumento más rico en la generación de contenidos que es internet mejora día con día nuestras vidas en las redes sociales de la web. Ya se inauguró el primer buscador social denominado Flock (www.flock.com) dirigido a todos los amantes de las redes sociales, su diseño incluye My world donde puedes meter tus sitios sociales como Flickr, Facebook, Twitter y muchos más. Es un buscador con el mismo código de Firefox, pero mejorado en sus aspectos de redes sociales. En su barra incluye «Medios» que se refiere tanto a fotografías como videos propios o de cualquier herramienta de redes sociales mencionadas. Si encuentras un sitio o foto que deseas compartir, basta arrastrarla a la barra lateral donde se encuentre el sitio donde existe su perfil (Facebook, hi5, Twitter) para que tus amigos lo vean. Asimismo, se pueden integrar los favoritos a del.icio.us o algún otro sitio de red social de favoritos.
El gigante millonario Google reta a Facebook a través de su herramienta OpenSocial (http://code.google.com/apis/opensocial/) que invita a desarrolladores de sitios de redes sociales de internet a usar sus aplicaciones para mejorar la capacidad social de sus sitios. La intención clara de Google es contar con las bases de datos de los usuarios no sólo de Facebook, sino de todas las herramientas sociales para impactar mejor el marketing por la web.

LA ESPERANZA DE LA WEB

Si las redes sociales obedecen a una estrategia que implica un objetivo, un plan de acción y un conjunto de recursos –otra vez de las corporaciones–, es claro que hay un interés económico, pero es mayor el interés por continuar con una internet generadora de contenidos, experiencias e inteligencias para crear la eficacia colectiva de la humanidad y hacernos más fácil la comunicación. Hoy se comienza a hablar de la Web Semántica que humanizará más a la tecnología. Quizá es la esperanza de la web: hacer un mundo más tolerante, más humano, más espiritual, más feliz.

istmo review
No. 386 
Junio – Julio 2023

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