¿Qué es la ecología?
Héctor Zagal y Enrique del Castillo
Ensayo
MiNos. México. 1995, 164 págs.
Héctor Zagal y Enrique del Castillo
Ensayo
MiNos. México. 1995, 164 págs.
En tiempos de crisis y de revisión del modelo económico mexicano aparece este pequeño libro sobre ecología. Los autores relacionan atinadamente el problema ecológico mexicano con el modelo de desarrollo neoliberal-especulativo. Su conclusión: el capitalismo especulativo (énfasis en las finanzas y descuido de la manufactura) es uno de los peores enemigos del medio ambiente.
A lo largo de los tres capítulos y de un interesante apéndice, los autores reiteran una y otra vez que el hombre requiere de la transformación del mundo natural para vivir. El hombre tiene derecho a servirse de la naturaleza. Sin embargo, este “servirse” no debe ser entendido al modo neoliberal. La propiedad privada tiene una “hipoteca ecológica”. Ni el individuo ni la humanidad en su conjunto son señores con derecho a “uso y abuso” del mundo natural.
Contrariamente a lo que sostienen algunos ecologistas ingenuos, el reto ecológico solamente puede superarse con alta tecnología. El desarrollo tecnológico es el único modo de continuar aprovechando la naturaleza sin destruirla. Desafortunadamente gran parte de la empresa mexicana está concebida como una institución financiera y no como una institución industrial. Ello lleva a que la industria mexicana carezca de armas suficientes para enfrentar el reto ecológico. Una economía donde el negocio de una empresa está en el tiempo que el dinero pasa en el banco nos dicen los autores es una economía incapacitada para combinar armónicamente el binomio productividad-ecología.
Se trata, pues, de un libro que se enfrenta con realismo al meollo de la cuestión ecológica: cómo conciliar desarrollo económico y conservación ambiental. Ni rastro de la cursilería e ingenuidad a las que son dados algunos grupos ecologistas. Se trata, además, de un libro que se refiere concretamente a las dificultades con que se encuentra el empresario mexicano para resolver el reto ecológico: uso de la ecología como bandera política, sistema fiscal inadecuado, polarización de las universidades hacia las finanzas en detrimento de la tecnología, falta de apoyo estatal para la planta industrial, etcétera.
La obra es un trabajo interdisciplinario (Zagal es profesor de Filosofía en la Universidad Panamericana, Del Castillo es profesor de ingeniería en la Universidad de Texas). Lo mismo se critica el mecanicismo de Descartes como la mala interpretación del mundo natural, que se analizan las técnicas de Forrester en conexión con el célebre informe The Limits to Growth, sin perder por ello la unidad de la obra y el estilo de lectura amable, tan difícil de lograr en una coautoría.
A lo largo de los tres capítulos y de un interesante apéndice, los autores reiteran una y otra vez que el hombre requiere de la transformación del mundo natural para vivir. El hombre tiene derecho a servirse de la naturaleza. Sin embargo, este “servirse” no debe ser entendido al modo neoliberal. La propiedad privada tiene una “hipoteca ecológica”. Ni el individuo ni la humanidad en su conjunto son señores con derecho a “uso y abuso” del mundo natural.
Contrariamente a lo que sostienen algunos ecologistas ingenuos, el reto ecológico solamente puede superarse con alta tecnología. El desarrollo tecnológico es el único modo de continuar aprovechando la naturaleza sin destruirla. Desafortunadamente gran parte de la empresa mexicana está concebida como una institución financiera y no como una institución industrial. Ello lleva a que la industria mexicana carezca de armas suficientes para enfrentar el reto ecológico. Una economía donde el negocio de una empresa está en el tiempo que el dinero pasa en el banco nos dicen los autores es una economía incapacitada para combinar armónicamente el binomio productividad-ecología.
Se trata, pues, de un libro que se enfrenta con realismo al meollo de la cuestión ecológica: cómo conciliar desarrollo económico y conservación ambiental. Ni rastro de la cursilería e ingenuidad a las que son dados algunos grupos ecologistas. Se trata, además, de un libro que se refiere concretamente a las dificultades con que se encuentra el empresario mexicano para resolver el reto ecológico: uso de la ecología como bandera política, sistema fiscal inadecuado, polarización de las universidades hacia las finanzas en detrimento de la tecnología, falta de apoyo estatal para la planta industrial, etcétera.
La obra es un trabajo interdisciplinario (Zagal es profesor de Filosofía en la Universidad Panamericana, Del Castillo es profesor de ingeniería en la Universidad de Texas). Lo mismo se critica el mecanicismo de Descartes como la mala interpretación del mundo natural, que se analizan las técnicas de Forrester en conexión con el célebre informe The Limits to Growth, sin perder por ello la unidad de la obra y el estilo de lectura amable, tan difícil de lograr en una coautoría.
