La fiebre amarilla
Luisa Castro
Novela
Anagrama. Barcelona. 1994, 171 págs.
Luisa Castro
Novela
Anagrama. Barcelona. 1994, 171 págs.
Luisa Castro (1966), poetisa y novelista, ha publicado anteriormente Odisea definitiva, libro póstumo; Los versos del eunuco; Baleas e baleas y El somier. La fiebre amarilla está ambientada en un lugar marinero denominado Cuatro Calles. La protagonista, Virginia, sufre una grave caída que es el detonante de una enfermedad irreversible. Durante el tiempo en que permanece en la cama evoca un pasado que se enmarca entre el momento de esta caída y la primera, sufrida mientras jugaba en lo alto de un árbol, cuando tenía diez años.
En el lecho de muerte, recibe la visita de su padre, que abandonó a la familia para irse con otra mujer cuando Virginia era tan sólo una niña. En torno a este encuentro se entremezclan numerosas historias. La protagonista rompe las barreras del tiempo y del espacio para adentrarse en los mundos que poblaron su infancia y juventud, mundos abordados desde planos distintos, en lo que se combinan hábilmente la realidad y la ficción. Las fantasías se cruzan con las obsesiones y delirios provocados por la propia enfermedad: un proceso de fiebre amarilla.
La novela, escrita en tercera persona, con un lenguaje poético y sugerente, es profunda, bastante equilibrada y sencilla.
En el lecho de muerte, recibe la visita de su padre, que abandonó a la familia para irse con otra mujer cuando Virginia era tan sólo una niña. En torno a este encuentro se entremezclan numerosas historias. La protagonista rompe las barreras del tiempo y del espacio para adentrarse en los mundos que poblaron su infancia y juventud, mundos abordados desde planos distintos, en lo que se combinan hábilmente la realidad y la ficción. Las fantasías se cruzan con las obsesiones y delirios provocados por la propia enfermedad: un proceso de fiebre amarilla.
La novela, escrita en tercera persona, con un lenguaje poético y sugerente, es profunda, bastante equilibrada y sencilla.