El testamento
John Grisham
Novela
Ediciones B. Barcelona. 1999, 463 págs.
John Grisham
Novela
Ediciones B. Barcelona. 1999, 463 págs.
John Grisham domina con maestría el suspense y la capacidad para fabular la realidad y someterla a juicio.
«Hasta el último día y hasta la última hora. Soy un viejo solitario que nadie ama, enfermo y resentido. Estoy preparado para el más allá; tiene que ser mejor que esto. El dinero es la raíz de mis males. Estoy enemistado con mis ex esposas y mis hijos: hoy se hallan reunidos aquí porque me estoy muriendo y ha llegado la hora de repartir el dinero. Llevo mucho tiempo esperando este día». Troy Phelan es uno de los hombres más ricos del mundo… y está dispuesto a dar una última sorpresa.
Una novela que se lee, más bien que se sorbe a borbotones: es imposible dejar de beber.
John Grisham es un autor consentido por los lectores (sus libros son siempre best-sellers) y por Hollywood que es feliz recaudando millones con las películas originadas en sus obras: El informe Pelícano, El cliente, La firma, El jurado…
En la portada se lee: «Grisham tras los pasos de Dickens y Graham Greene». No es para tanto. Grisham ha encontrado, y muy bien, un nicho especialísimo en el mercado: lecturas con ritmos vertiginosos, soluciones sugestivas y alguna que otra reflexión trascendente sin visos de moraleja. Y eso es todo un arte.
«Hasta el último día y hasta la última hora. Soy un viejo solitario que nadie ama, enfermo y resentido. Estoy preparado para el más allá; tiene que ser mejor que esto. El dinero es la raíz de mis males. Estoy enemistado con mis ex esposas y mis hijos: hoy se hallan reunidos aquí porque me estoy muriendo y ha llegado la hora de repartir el dinero. Llevo mucho tiempo esperando este día». Troy Phelan es uno de los hombres más ricos del mundo… y está dispuesto a dar una última sorpresa.
Una novela que se lee, más bien que se sorbe a borbotones: es imposible dejar de beber.
John Grisham es un autor consentido por los lectores (sus libros son siempre best-sellers) y por Hollywood que es feliz recaudando millones con las películas originadas en sus obras: El informe Pelícano, El cliente, La firma, El jurado…
En la portada se lee: «Grisham tras los pasos de Dickens y Graham Greene». No es para tanto. Grisham ha encontrado, y muy bien, un nicho especialísimo en el mercado: lecturas con ritmos vertiginosos, soluciones sugestivas y alguna que otra reflexión trascendente sin visos de moraleja. Y eso es todo un arte.
