Repensar la ciencia
Natalia López Moratalla
EIUNSA. Madrid, 2006. 194 págs.
De niña, la autora quería ser «una descubridora de cosas que ayudaran a la gente». Compartía ese sueño con el bordado, una afición muy propia de Granada, su tierra natal.
Ahora, la doctora López pone por escrito ese sueño y nos enseña que «el mundo natural no es un capricho arbitrario, no es un sinsentido, y tampoco podemos darle sentido a nuestro antojo».
Escrito con el tono ligero y accesible del verdadero científico (que tiene la precaución de no meter en líos al inocuo lector), el libro es un diálogo abierto tras la cuestión fundamental: qué quiere la ciencia.
Asequible como ella, Repensar la ciencia traza las rutas recorridas por cualquier científico tras una verdad. En esta guía carretera, las indicaciones de la autora son siempre eficaces, ágiles y amables.
Amante de las biografías, la doctora López consigue acercarnos al maravilloso mundo de los porqués, un mundo que no está desprovisto de certezas y que no es pura duda.
Consciente de que la labor científica puede convertirse en un griterío, Natalia López ofrece una solución a ese riesgo aturdidor: «Sólo la amplitud del ámbito interior de apertura de cada uno permite, o no, percibir la armonía de las voces y depurarlas de todo aquello que disuena y confunde».
Natalia López Moratalla
EIUNSA. Madrid, 2006. 194 págs.
De niña, la autora quería ser «una descubridora de cosas que ayudaran a la gente». Compartía ese sueño con el bordado, una afición muy propia de Granada, su tierra natal.
Ahora, la doctora López pone por escrito ese sueño y nos enseña que «el mundo natural no es un capricho arbitrario, no es un sinsentido, y tampoco podemos darle sentido a nuestro antojo».
Escrito con el tono ligero y accesible del verdadero científico (que tiene la precaución de no meter en líos al inocuo lector), el libro es un diálogo abierto tras la cuestión fundamental: qué quiere la ciencia.
Asequible como ella, Repensar la ciencia traza las rutas recorridas por cualquier científico tras una verdad. En esta guía carretera, las indicaciones de la autora son siempre eficaces, ágiles y amables.
Amante de las biografías, la doctora López consigue acercarnos al maravilloso mundo de los porqués, un mundo que no está desprovisto de certezas y que no es pura duda.
Consciente de que la labor científica puede convertirse en un griterío, Natalia López ofrece una solución a ese riesgo aturdidor: «Sólo la amplitud del ámbito interior de apertura de cada uno permite, o no, percibir la armonía de las voces y depurarlas de todo aquello que disuena y confunde».
