Se documenta una herencia aun cuando no se perciba
Como las tradiciones, también existen enfermedades que se heredan. Científicos de la Universidad de Stanford, confirmaron que la depresión puede traspasarse de madre a hija. El estudio analizó el funcionamiento del cerebro en niñas de 9 a 14 años que se sentían bien, pero cuyas madres habían sufrido o estaban viviendo una depresión.
Al mostrarles imágenes de personas que expresaban emociones como alegría, tristeza o rabia, el cerebro de las menores mostró muy baja actividad neuronal, reflejo de lo que sucedía en las adultas deprimidas.
Psicólogos liderados por el académico Ian Glotlib midieron los niveles de hormonas del estrés particularmente del cortisol en hijas de pacientes deprimidas, que mostraron alzas abruptas en los niveles de esta sustancia y una recuperación del estado normal mucho más lenta.
Según el psiquiatra Raúl Riquelme, miembro de la Sociedad Chilena de Salud Mental, el estudio de Stanford ofrece una evidencia científica muy clara en torno a algo que los psiquiatras veían en la práctica. La forma en que la madre enfrenta la vida y ve el mundo se transforma en un patrón negativo que se transmite a los hijos, perpetuando así el círculo vicioso de la depresión dentro de la familia. Por ello, agregan expertos estadounidenses, las intervenciones deberían programarse para tratar a toda la familia y descubrir depresiones que permanezcan latentes.
La Tercera. (20/X/04)