Soy ingeniero civil, hace aproximadamente un año fui contratado por otro ingeniero para diseñar ciertas partes de un puente que el gobierno de la ciudad le encargó. Hice los planos de la parte que me correspondía y recibí honorarios por el trabajo. Meses después, el ingeniero que me contrató inscribió el trabajo en un concurso nacional de diseño de puentes y ganó el primer lugar. No recibí créditos por mi participación en el proyecto. ¿Puedo reclamar el crédito y alguna parte proporcional del premio? En caso afirmativo, ¿qué exactamente?
Los asesores sugieren
1 Es difícil determinar en qué proporción sus aportaciones contribuyeron o no al premio recibido. En un caso extremo, aunque quizá poco probable, el puente pudo ser premiado a pesar de las limitaciones de diseño de las partes a su cargo. Lo que queda claro con el premio es que el proyecto en su conjunto fue el mejor evaluado por los jueces. Sucede como en una película o una sinfonía; se lleva el reconocimiento el director, aunque la tarea fue de todos: La sangue del soldato fa grande il capitano, dicen en Italia. Sin embargo, en esas obras colectivas suele darse el crédito a todos los que participaron en lo que cada uno hizo, y a eso sí tiene usted derecho y puede darlo a conocer.
Por otro lado, mantener una buena relación con ese ingeniero constructor puede ser muy benéfico para su desarrollo personal como ingeniero diseñador.
ARMANDO REYGADAS
Abogado y consultor de empresas
2 Estamos ante un caso de plagio (copiar en lo sustancial obras ajenas dándolas como propias). Evidentemente se trata de una mentira y de una acción en contra de la justicia, éticamente reprobable.
La protección a las obras creativas –derechos de autor– reviste diversas modalidades en los sistemas jurídicos. En el caso planteado, parece poco probable que se puedan exigir jurídicamente los derechos correspondientes por la autoría del proyecto, ni el dinero del premio obtenido. En muchos ámbitos profesionales es común considerar que la persona contratada para investigación o desarrollo de un proyecto cede su creatividad a la persona o institución que contrata. A menos que se diga otra cosa. Lo único recomendable en esta situación, es hablar con el ingeniero contratante tratando de lograr alguna compensación.
PABLO RIBA GARGOLLO
Abogado y experto en ética de la empresa
