Petros Márkaris
Tusquets. Barcelona, 2013
253 pp
Petros Márkaris se adentra en los vericuetos de la novela policiaca de un modo que, para los esquemas clásicos norteamericanos y los recién llegados nórdicos, pareciera hasta ingenuo: un comisario griego, Costas Jaritos, con una familia no sólo estable sino bien avenida y un entorno mediterráneo donde —a pesar de los inevitables cataclismos internos y externos— no suena a utopía la buena voluntad, la alegría y la fraternidad.
Es un retrato de 2014, año en el que la crisis socioeconómica y política conduce a Grecia a declararse en quiebra y regresar a la dracma. La calle se llena de manifestantes y la tragedia del desempleo y la inflación se vive en cada hogar. En medio de tales desgracias, se cometen tres desconcertantes asesinatos. La policía, que por el momento por el que pasa el país no cobrará al menos durante tres meses, deberá ponerse a trabajar en serio.
El basamento de las novelas de Márkaris es el pulso de lo social. Frente a un ineficaz sistema político, débil y corrupto, la solidaridad surge como respuesta del día a día, como el baluarte que posibilita el resplandor de la valía personal y la fuerza que sólo surge de la suma audaz de voces y voluntades.