Reclusos en su cuarto
Han crecido en una de las sociedades más ricas del mundo. Sus padres les han proporcionado todo lo que han querido y más, pero no tienen amigos y muchos son hijos únicos. No hablan con nadie y están encerrados en su cuarto. Se trata de un fenómeno que afecta a un creciente número de jóvenes desde los 13 a los 30 años.