Un buen negocio
Si quiere que su empresa florezca, más vale plantar en terreno fecundo. El único recurso verdaderamente vital es el hombre. Por eso, el empresario debe ser jardinero que descubra y cuide el buen grano desde las aulas y el hogar.
Si quiere que su empresa florezca, más vale plantar en terreno fecundo. El único recurso verdaderamente vital es el hombre. Por eso, el empresario debe ser jardinero que descubra y cuide el buen grano desde las aulas y el hogar.
Para la fábrica de sueños, la realidad no únicamente existe para reproducirse sino para conquistarse: tiene la verdad quien reproduce mejor, y reproduce mejor quien aprende el único lenguaje que define lo digno de perdurar, esto es, lo digno de existir.
Conocemos de memoria todos los males que aquejan a la humanidad, los hemos escuchado a diario como música de fondo.
Joan Ginebra** desvela, en su libro El liderazgo y la acción (1), un nuevo modo de entender y enseñar el liderazgo; descubre un mundo conocido hasta ahora sólo por quienes lo han vivido en carne propia.
Henry James
Cuentos
Rialp. Madrid. 1992, 192 págs.
El origen del servicio es la persona. El reto fundamental de los prestadores de servicio es rescatar la calidez y sentido humano para que el cliente se sienta de verdad como en casa.
En la urdimbre familiar, de amistad y convivencia, hermandad y filiación, lo que se relaciona es la persona en su condición de puro ser, en donde cada uno tiene esa cualidad absoluta que corresponde a la persona como tal. Hemos de dar rienda suelta a nuestra nostalgia de «sentirnos en casa», porque es ahí donde adquirimos o recuperamos nuestra condición de personas, salvarguardados de los reglamentos constriñentes y de las mercaderías invasoras.
La capacidad de ser feliz tiene mucho de viajera; empieza un día al iniciar el recorrido al centro de uno mismo. Los padres y educadores deberían divertirse cuando educan, porque la esencia de la educación es la felicidad.
Cuando se rema a contracorriente, los brazos se cansan y el ánimo decae. Vale la pena tener al mando ideas claras y firmes que nos recuerden la alegría de vivir en balsa.
Sonriente y visionario, construyó un imperio de imaginación y convirtió su nombre en sinónimo de alegría. Una vida llena de logros que hace soñar con hadas y ratones.
© IPADE BUSINESS SCHOOL. TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS. 2019
Aviso de Privacidad Términos y condiciones Media Kit Guía de colaboradores Contacto