Seducción: entre Narciso y el vampiro
El vampiro, tal como se le ha conocido en la literatura, guarda estrechas semejanzas con el narcisista. éste ha sido ensalzado, hoy, como la personalidad perfecta: posee los secretos del poder y la seducción de la imagen, niega el compromiso, la conciencia, la espiritualidad pero, sobre todo, la trascendencia del amor.