El carácter barroco mexicano o el milagro de la paradoja
El barroco en México no tuvo que organizarse, que surgir, ya estaba aquí, simplemente le dijimos: "pase usted, está usted en su casa". Hay que abordar este tema como asunto distinto y totalmente mexicano, no es sólo un quehacer, sino la existencia misma, como algo menos pintoresco y más profundo. Tal vez, así, nuestro "barroquismo" deje de ser "como lo es todavía" un tanto vergonzante y más aprovechable.