En 1998, por primera vez, la Academia Real de Ciencias otorgó el Nobel de Economía a un estudioso indio por haber «contribuido a restaurar la dimensión ética del debate económico y social, combinando herramientas económicas y filosóficas». Con esto se reconoce un área marginada de la economía: la lucha contra la pobreza. ISTMO se honra en publicar un texto de Amartya Sen al que el transcurso del tiempo ha dado la razón y ha validado sus aportaciones.
La solidaridad tiene calor humano, resulta expansiva y comunicable, va bastante más allá de la pura justicia, afina la sensibilidad, rompe las costras, los muros o las montañas del egoísmo, se mueve con la elegancia que siempre confiere la magnanimidad, y es una siembra generosa de alegría.
Director: Peter Chelsom. Guión: Charles Leavitt. Duración: 105 min. Clasificación: B
La que fuera laureada con el Nobel de la Paz en 1979, yace ahora en una modesta tumba de mármol blanco en la casa central de las Misioneras de la Caridad. La Orden está distribuida en 133 países, donde más de 4 mil monjas de 80 nacionalidades atienden, en 600 centros, a los más pobres en todo el mundo. Desde Calcuta, nuestro autor esboza los rasgos de esta mujer que, a golpe de congruencia, dejó huella.
La solidaridad humana es la diana final donde debieran impactar la dignidad y el progreso de cada hombre concreto.
¿Agresivo, blasfemo, pesimista? Saramago, nuestro último premio Nobel de literatura, está en todas las librerías; ¿además de estas «cualidades» "que saben vender, y muy bien, los publicistas" hay algo que valga la pena en su escritura? Sí, una pluma original que toca lo más íntimo del alma humana.
Hay obsesiones que nos quitan el sueño, la salud, la tranquilidad… o la indiferencia. A partir de este ejemplar, istmo construye un espacio particular para que sea habitación "todos los números" de Héctor Zagal. ¡Bienvenido!
A mediados del siglo XVIII, una novela "Las penas de amor de Werther" avisa que la frontera entre realidad y ficción posee perfiles de agua. De Alemania a China se derramaron lágrimas… y algunas vidas. Y, como escribe un biógrafo de Goethe, «todo el mundo (…) se suicidó un poco». ésta es, en definitiva, la perenne y poderosa razón del arte, la perenne y poderosa razón de la escritura.
© IPADE BUSINESS SCHOOL. TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS. 2019
Aviso de Privacidad Términos y condiciones Media Kit Guía de colaboradores Contacto