Feminizar el mundo: una revolución silenciosa
Sólo la presencia activa de la mujer puede asegurarnos que se respetarán los valores genuinos de la persona a la hora de tomar aquellas medidas que incidan con mayor vigor en la vida de las familias, en la edificación de un ambiente realmente educativo y en el porvenir de la juventud y de la humanidad.
El paso de la mujer al mundo laboral apunta a su óptimo desarrollo y plenitud personal. Hoy somos testigos del beneficio que se obtiene con su presencia en todos los ámbitos laborales. No es cuestión de buenas intenciones: las empresas reclaman la presencia de la mujer para que el trabajo sea productivo, flexible, creativo y esté en función de la persona y la familia.
La mujer mexicana y latinoamericana incursiona cada vez con mayor fuerza en el terreno laboral. Sin embargo, nadie le enseñó cómo compaginar trabajo, familia y vida personal. Martha Rivera, directora del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección, del IPADE, comparte los planes que hay para potenciar esta oportunidad.